Me miré en tus ojos y no me vi a mi mismo.
Vi alguien más alto, más listo, más guapo.
Alguien más fuerte, de voluntad inquebrantable.
Una persona capaz de conseguir lo que se propone.
Me miré en tus ojos y allí el viento no me arrastraba.
Asaltaba castillos y mis palabras surcaban fronteras,
sin miedo al no, sin miedo al tú, sin miedo al yo.
Sin miedo a tropezar en este camino lleno de piedras.
Me miré en tus ojos, y en ellos la vida tuvo sentido
porque allí descubrí un poeta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario